El mantenimiento y la limpieza del granito resultan sencillos. Con poco esfuerzo y utilizando los materiales correctos conseguiremos que reluzca durante muchos años.
Una vez el suelo de granito esté instalado o recién pulido, es importante saber las mejores técnicas para mantenerlo limpio. Con poco esfuerzo conseguiremos que el material se mantenga en buen estado durante mucho tiempo.
- Limpieza rutinaria. Se necesita una bayeta o fregona de microfibra o algodón humedecida con agua tibia. Si queremos desinfectar el área, se pueden utilizar jabones o fregasuelos con un ph neutro.
- Retirar manchas recientes. Las manchas recientes desaparecerán fácilmente de la superficie del granito utilizando el mismo método que durante la limpieza rutinaria.
- Acabar con las manchas resistentes. Si con el método normal siguen quedando manchas, podemos aplicar con un paño un limpiador específico para granito o bien aplicar una pasta casera hecha a base mezclar vinagre blanco con bicarbonato de sodio. Es interesante que se deje actuar el producto o la pasta durante unos minutos y que posteriormente se aclare con agua.
- Eliminar las manchas extremadamente resistentes. Si nos topamos con manchas difíciles de hacer desaparecer, lo mejor es llamar a una empresa de profesionales que disponga de las máquinas y los productos adecuados para lograr el acabado deseado y que la superficie recupere su brillo y su elegancia.
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