El granito es un material extraído directamente de la tierra que se caracteriza por su gran resistencia al paso del tiempo. Tiene las características idóneas para ser uno de los mejores materiales para la construcción tanto en interiores como exteriores.
El granito es una roca natural compuesta principalmente por fragmentos de piedras nobles como el cuarzo, la mica y el feldespato, además de otros minerales en menor cantidad, como la mica, las plagioclasas o las hornblendas, que le ofrecen la diversidad de colores y tonalidades.
Se trata de un material de buena calidad utilizado en la construcción desde tiempos inmemoriales. Sus características físicas le dotan de mucha dureza y resistencia, por lo que tiene gran durabilidad en el tiempo. El granito puede ser utilizado tanto en interior como en exterior, en zonas de paso o expuesto a cargas pesadas y al desgaste atmosférico. Acostumbra a ser instalado como suelo o en escaleras de los hogares, en las encimeras de la cocina, en fachadas o en mobiliario urbano.
Para obtener este material, en primer lugar se extrae de las canteras en grandes y pesados bloques, luego se corta en láminas o piezas más pequeñas, para finalmente exponerlo a una serie de procesos químicos o mecánicos que le darán el acabado que se necesita para cada obra en donde se quiera instalar.
No es ninguna casualidad que el granito se haya utilizado desde la prehistoria, sus características inmejorables lo convierten en uno de los mejores materiales que existen para construir obras resistentes y duraderas.
La buena reputación como elemento de construcción se debe a que es muy duro, soporta cargas y temperaturas muy elevadas, roces y golpes y, además, su escasa porosidad lo hace impermeable.